CARLOS ALBERTO
POR GRACIA DE DIOS
Rey de Cerdeña, Chipre y Jerusalén
Duque de Saboya, Génova, etc. etc.
Principe de Piemonte, ecc. ecc.
Teniendo en cuenta la fidelidad y los buenos sentimientos de los pobladores valdenses, los Reyes, nuestros predecesores, gradualmente y con sucesivas medidas han derogado, en parte, o moderado, las leyes que antiguamente restringían sus capacidades civiles. Y nosotros mismos, siguiendo las huellas, hemos concedido a estos Nuestros súbditos facilidades cada vez más amplias, dando dispensas frecuentes y amplias del cumplimiento de las leyes mismas.
Y ahora que cesaron las razones por las cuales fueron sugerido estas restricciones, puede llevarse el sistema ya adoptado progresivamente a favor de ellos, Estamos de buen grado resueltos a hacerlos partícipes de todas las ventajas conciliables con las máximas generalidades de nuestra legislación.
Y así por lo siguiente, de Nuestro conocimiento cierto, Real autoridad, con el asesoramiento de nuestro Consejo, hemos ordenado y ordenamos lo siguiente:
Los valdenses son bienvenidos a disfrutar de todos los derechos civiles y políticos de nuestros súbditos, a asistir a las escuelas dentro y fuera de la Universidad, y acceder a los grados académicos.
Nada es sin embargo innovado en cuanto al ejercicio de su culto y a las escuelas dirigidas por ellos.
Dado en Turín, el día diecisiete de febrero, del año del Señor un mil ochocientos cuarenta y ocho y de Nuestro Reino el decimoctavo.
1 comentario
Sólo quiero confesarte que soy muy nuevo en los sitios web y realmente disfruto tu pagina. Lo agregare en mis preferidos. Extraordinaria pesquisa! Muchísimas gracias por escribir con nosotros tu sitio web.